Ya sea una cuestión de estilo, de comodidad o de prejuicios anacrónicos, las tenistas son de las pocas deportistas profesionales que siguen apostando por esta controvertida prenda para competir.
LOS EJERCICIOS DE MUSCULACIÓN EN EL TENIS Los ejercicios de musculación en el tenis brindan una gran cantidad de beneficios para la práctica de la mayoría de deportes de competencia. En el caso de los tenistas, encontrarán que la práctica constante de ejercicios de musculación les ayudará a aprender y perfeccionar la técnica de sus movimientos para el tenis, así como a aumentar la velocidad de los mismos. Cabes señalar, que los ejercicios de musculación en el tenis no necesariamente implican el trabajo con cargas muy pesadas, si no por el contrario bastante livianas. Contrariamente a lo que se ha venido creyendo por mucho tiempo, estos ejercicios de tenis efectuados de una manera responsable, no tienen porque afectar al crecimiento ni causar hipertrofias musculares. En estos casos, también es muy importante trabajar sobre entrenamientos de running, para coger práctica y estar en forma. La pisada del corredor es muy importante, y en este caso en particular EJERCICIOS DE COORDINACIÓN EN EL TENIS El tenis es uno de los deportes que más requiere de una adecuada coordinación física, por parte de sus jugadores. En tal sentido, existen una serie de ejercicios de coordinación de tenis bastante sencillos, que ayudarán a cualquier tenista para afianzar su nivel de coordinación. Entre los ejercicios de coordinación en el tenis, se encuentra el conocido como los “globos volantes”, el cual consiste en mantener un número determinado de globos en el aire, variando la cantidad constantemente. Si se desea realizar ejercicios con pelota, tenemos: Golpear y atrapar: donde el entrenador lanza dos pelotas y el jugador debe coger una con la mano y golpear la otra con la raqueta. Pelotear y botar: en la que el entrenador le lanza las pelotas al jugador, quien debe tomarlas y devolverlas con la mano, en el menor tiempo posible. Un ejercicio de coordinación más exigente es el conocido como “golpe a la pata coja”, que consiste en responder a los lanzamientos de pelota del entrenador, apoyado en una sola pierna. Los golpes en el tenis, abarcan la mayor cantidad de técnicas comprendidas en este deporte. El más importante de ellos es el saque. La importancia de las técnicas de golpes en el tenis radica, en que lleva consigo la posibilidad del punto, si el rival no es capaz de contestarlo.Además de conseguir los puntos, el jugador que maneje mejor los saques, va a tener la posibilidad de marcar el ritmo del partido. El saque presenta distintas clases de efectos, como el cortado, el plano o el liftado. Los tipos de efectos que se obtienen con los golpes en el tenis, varían dependiendo de la forma en que se empuña la raqueta, el bote que se le dé a la bola y la dirección con que se le golpee. Los saques más difíciles de recepcionar, son los liftados. Estos saques se caracterizan porque la bola cambia de dirección inicial y de velocidad, después de rebotar contra el suelo. Otros golpes conocidos son el revés, la derecha, los golpes de volea, la dejada, la contra dejada y el remate. En todos estos casos. |
DE NUESTRA OBSESIÓN Negocio del deporte Kelsey Kennedy El vestido de tenis Premier Power Slam dress y sin cintura estilo "babydoll" de Nike no ganó ningún punto de los campeones de tenis que jugaron en Wimbledon esta semana. A las mujeres atletas patrocinadas por Nike se les dio la prenda para usar en el torneo, pero muchas encontraron que se requerían modificaciones de bricolaje por el bien de la comodidad y la decencia. El vestido corto de espalda nadadora de Nike con "pliegues poderosos" era tan informe que terminó volando por el aire durante los partidos, exponiendo los cuerpos de los jugadores. The Guardian lo comparó con un "camisón", un estilo que normalmente no se ve en las canchas de tenis. Las cintas para la cabeza se convirtieron en cinturones. Se usaron camisas en la parte superior para mantener el vestido bajo control. La jugadora británica Katie Swan simplemente metió el vestido en sus pantalones cortos en medio de un partido. Según los informes, Nike alteró el vestido después del comienzo del torneo cosiendo aberturas en los lados para evitar que el vestido volara, pero para entonces, muchas mujeres estaban listas para cambiar a una combinación tradicional de camisa y falda. El torneo de tenis de élite de Londres es famoso por su código de vestimenta : la vestimenta debe ser completamente blanca, incluida la ropa interior y el equipo médico, y debe cumplir con los "estándares comunes de decencia". Nike respondió a los rumores de que el vestido había sido retirado con una declaración oficial: El producto no ha sido retirado del mercado y, a menudo, personalizamos los productos y hacemos modificaciones para los atletas mientras compiten. Trabajamos en estrecha colaboración con nuestros atletas para brindarles un producto que los ayude a desempeñarse y sentirse mejor en la cancha. Si ese es el objetivo, este vestido se quedó corto, dijeron algunos jugadores. “Si te sientes bien en la cancha, puedes jugar mejor. Si algo te molesta todo el tiempo, no ” , le dijo al New York Times la jugadora rusa Daria Kasatkina, quien se quitó el vestido después de practicar con él . "No es muy agradable". yers who actually liked the loose dress. FROM OUR OBSESSION Business of Sport Kelsey Kennedy Nike’s loose, waistless “babydoll”-style Premier Power Slam tennis dress didn’t win any points from the tennis champs playing at Wimbledon this week. Women athletes sponsored by Nike were given the garment to wear for the tournament, but many found that DIY alterations were required for the sake of comfort and decency. Nike’s short racerback dress with “power pleats” was so shapeless that it ended up flying into the air during matches, exposing players’ bodies. The Guardian compared it to a “nightie,” a style not typically seen on tennis courts. Headbands became belts. Shirts were worn on top to keep the dress under control. British player Katie Swan simply tucked the dress into her shorts in the middle of a match. Nike reportedly altered the dress after the start of the tournament by sewing up slits in the sides to keep the dress from flying up, but by then, many women were ready to switch to a traditional shirt and skirt combination. The elite London tennis tournament is famous for its dress code: Outfits must be all white, including undergarments and medical equipment, and must meet “common standards of decency.” Nike responded to rumors the dress had been recalled with an official statement: The product has not been recalled and we often customize products and make alterations for athletes as they compete. We work closely with our athletes to provide them with product that helps them perform and feel their best on the court. If that’s the goal, this dress fell short, some players said. “If you feel good on the court, you can play better. If something is bothering you all the time, no,” Russian player Daria Kasatkina, who ditched the dress after practicing in it, told the New York Times. “It’s not very nice.” |
Tenis del pasado
La presión social y comercial que insta a las mujeres a tener que lucir atractivas en cualquier momento del día es una de las razones de mayor peso para que la tradición continúe vigente, tenistas usen faldas.
“La mayoría no visten shorts porque lucir monas en la pista (y mostrar un poquito de ropa interior de vez en cuando) es una forma de conseguir apoyo de los fans y, sobre todo, aumentar el precio de sus contratos de patrocinio”, escribía en Slate la periodista Eliza Truitt. Una teoría ratificada por la mismísima Garbiñe Muguruza, ganadora de Roland Garros y Wimbledon, que evocó en Papel que, “la parte más morbosa, las piernas y las faldas, venden más que el deporte”.
El reglamento de los diferentes torneos de Grand Slam, que puede poner cortapisas sobre el color de la vestimenta –como el blanco tradicional de Wimbledon– o vetar prendas en particular –el mono posparto de Serena Willams en 2018 sigue levantando polvareda–, no dice nada sobre la obligatoriedad de lucir falda ni de la censura de los pantalones cortos. Entonces, ¿por qué las marcas se empeñan diseñar faldas cuando el 99% de las jugadoras visten shorts debajo de ellas? La propia Vanessa Friedman, editora de moda de The New York Times, asegura que, si la prenda alguna vez tuvo un propósito, “que la atleta demostrara claramente cuál era su género para aminorar la amenaza de su poder deportivo”, ese efecto se ha desvanecido hoy en día. “Quizá sean, como dice Abby Swancutt, directora de diseño de Nike, una especie de herramienta psicológica, un símbolo para la atleta, que diferencia un partido de Grand Slam de una sesión de entrenamiento. Quizá enaltezcan ese sentimiento de ‘estar lista’ gracias a la moda. Pero la verdad es que también son sombras de estereotipos viejos”, escribe.
Clichés tan rancios que evocan episodios como el vivido en 1958 por la tenista estadounidense Karol Fageros, vetada en Wimbledon tras competir antes en París luciendo ropa interior dorada, de acabado brillante, bajo su falda blanca. El argumento esgrimido por los árbitros era que “podía distraer a los oponentes”, y tuvo que cubrirlo con encaje blanco para poder jugar en las pistas londinenses. Sin saberlo, Álvarez o Fageros fueron pioneras en el uso de los llamados skorts, esa unión de minifalda y pantalón que aúna comodidad y feminidad, omnipresente hoy en día en las tiendas. Los skorts se han erigido en uno de los artículos más virales de TikTok y prenda emblema para la generación Z, que rememora su popularidad de principios del siglo con embajadoras como Britney Spears o Christina Aguilera.
Pero si hay una figura revolucionaria en el circuito y que se ha atrevido a desafiar los códigos clásicos de vestimenta esa es Serena Williams. La ganadora de 23 Grand Slam es considerada la deportista más influyente de la historia en lo que a la moda se refiere, habiendo lucido en las pistas monos asimétricos, americanas, tutús de bailarina, corsés, chaquetas de cuero, botas negras, vestidos cut out o faldas vaqueras. Cuando cerró con Nike a finales de 2003 el contrato de esponsorización más lucrativo firmado por una mujer hasta la fecha, la de Michigan dejó claro al equipo de diseño aquello de antes muerta que sencilla.
“Les dije, ‘Mirad, quiero lucir muy bien en la pista. No tengo que estar comodísima. Si queréis haced cambios y usar diferentes tejidos que otros jugadores no quieren llevar, hacedlo. A mí no me hace falta sentirme tan confortable como a ellas”, declaró a ESPN.
En su caso, como en el de otras rivales contemporáneas como Maria Sharapova, se ha criticado hasta los gemidos que emite en la pista.
El campeón alemán Boris Becker incluso defendió su prohibición “por ser demasiado sexuales”, aunque se le olvidó mencionar a Rafa Nadal en su protesta, una de las estrellas más conocidas por sus sonidos de esfuerzo.
La conciliación entre moda y rendimiento no siempre ha sido abrazada por todas las jugadoras. En la edición de Wimbledon 2016, varias tenistas patrocinadas por Nike se quejaron de que el diseño creado por la firma de Oregón para la ocasión, un vestido blanco vaporoso más cercano a un camisón que al equipamiento deportivo habitual, no solo era demasiado corto, sino que obstaculizaba su juego con el vuelo que tomaba en cada golpe. La tenista británica Katie Boulter decidió usar una cinta para el pelo a modo de cinturón improvisado para mantener el estilismo a raya y la checa Lucie Hradecka apostó por unos leggins debajo del minivestido. “No me sentía cómoda enseñando tanto”, alegó la alemana Sabine Lisicki, que descartó lucir la prenda en las pistas.