Luis Alberto Bustamante Robin; Jose Guillermo Gonzalez Cornejo; Jennifer Angelica Ponce Ponce; Francia Carolina Vera Valdes; Carolina Ivonne Reyes Candia; Mario Alberto Correa Manríquez; Enrique Alejandro Valenzuela Erazo; Gardo Francisco Valencia Avaria; Alvaro Gonzalo Andaur Medina; Carla Veronica Barrientos Melendez; Luis Alberto Cortes Aguilera; Ricardo Adolfo Price Toro; Julio César Gil Saladrina; Ivette Renee Mourguet Besoain; Marcelo Andres Oyarse Reyes; Franco Gonzalez Fortunatti;Patricio Ernesto Hernández Jara;Demetrio Protopsaltis Palma;Nelson Gonzalez Urra ; Paula Flores Vargas;Ana Karina Gonzalez Huenchuñir; Ricardo Matias Heredia Sanchez; Alamiro Fernandez Acevedo; Soledad García Nannig;
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El director de la Academia Judicial, Eduardo Aldunate |
Introducción
“Es deficiente y en cuestiones bien básicas”
El director de la Academia Judicial, Eduardo Aldunate, que selecciona a quienes pueden entrar a una carrera en el Poder Judicial aclara que en general “algo pasa con la enseñanza del Derecho”.
Una prueba con 140 preguntas es sólo la primera etapa que deben superar los cientos de candidatos que año a año intentan comenzar una carrera como jueces en el Poder Judicial. Para esto, deben superar todas las sesiones que la Academia Judicial ha dispuesto en este proceso en el que sólo 24 abogados son seleccionados. Sin embargo, llenar los 24 cupos disponibles ya no es tan fácil. El director del organismo, en conversación con El Mercurio, asegura que la formación en Derecho ya no es óptima. “No podría decir en qué medida ha ido bajando, pero algo pasa con la enseñanza del Derecho a un nivel universitario en general”. “Lo que están arrojando como resultado las escuelas de Derecho es deficiente y en cuestiones bien básicas”, continúa el abogado.
Formación de los Jueces.
Formación de los Jueces.
Para llegar al Poder Judicial, los entre 300 a 500 abogados que ingresan en cada proceso deben sortear la prueba de 140 preguntas de selección múltiple, aquí sólo los 120 mejores puntajes avanzan a una etapa de resolución de casos. De aquí, se seleccionan 90 postulantes que deben rendir un test psicométrico, una entrevista individual y una actividad grupal que busca evaluar la respuesta de los participantes. Después de todo esto, quedan 40 abogados, de los que una comisión especial entrevista para dejar sólo 24. Aldunate explica que hace años se aprobó que no se llenaran todos los cupos si los candidatos no llegaban al nivel requerido. Esto, principalmente, porque “la lógica nuestra era que quienes ingresaran [al Poder Judicial] fueran candidatos relativamente buenos o más allá de cierto nivel”, sentenció.
Academia Judicial.
Desde 1996, cuando comenzó a funcionar esta "escuela", han egresado más de 1.500 jueces. La mayoría sigue proviniendo de universidades tradicionales.
El director de la Academia Judicial, Eduardo Aldunate, lleva prácticamente ocho años a la cabeza de esta especie de "escuela judicial", que imparte cursos de formación, habilitación y perfeccionamiento desde 1996. Su creación buscó transparentar y permitir una mejor selección de quienes integrarían la magistratura en el país y desde entonces han egresado más de 1.500 jueces.
Para que un abogado pueda convertirse en juez debe postular a la Academia y rendir un examen con 140 preguntas de selección múltiple. Los 120 mejores puntajes pasan a la siguiente etapa de resolución de casos. De ellos, 90 llegan a un tercer filtro: un test psicométrico, una entrevista individual y una actividad grupal, donde el objetivo es evaluar su respuesta ante un conflicto "relativamente polémico", explica Aldunate. Finalmente, 40 son entrevistados por una comisión que debe elegir un máximo de 24 candidatos.
Hace varios años se aprobó que no se llenaran todos los cupos si no había candidatos idóneos. "Estas son personas que van a entrar al Poder Judicial y una vez que entran no salen más, entonces la lógica nuestra era que quienes ingresaran a formación fueran candidatos relativamente buenos o más allá de cierto nivel", advierte el director.
Cantidad vs. calidad
Los postulantes en cada proceso van de los 300 a los 500 abogados y, en los últimos años, dice Aldunate, esas cifras reflejan que el interés en la magistratura no ha disminuido. Pero, apunta, "también puede responder, en parte, a que los abogados que egresan cada año son miles y siguen aumentando".
Según estadísticas del Poder Judicial, si en 2001 la Corte Suprema entregó el título de abogado a 1.222 personas, el año recién pasado, 2017, lo hizo a más de 3.800 egresados de Derecho.
-Muchas universidades imparten hoy la carrera de Derecho. ¿El explosivo aumento en el número de abogados impactó en la calidad de los mismos?
"Tendría que ir a la estadística de resultados de los exámenes. Como en la prueba de alternativa se cortan los mejores 120, no me he preguntado cuán mal están los que quedan por debajo, pero sí lo que yo diría es que en la resolución de casos, en que a nosotros nos llegan las notas de todos (los que llegan a esa etapa), diría que la calidad no es la deseable. No podría decir en qué medida ha ido bajando, pero algo pasa con la enseñanza del Derecho a nivel universitario en general. La percepción es que lo que están arrojando como resultados las escuelas de Derecho es deficiente y en cuestiones bien básicas. En general, no escuelas en particular".
Por lo mismo, hace algunos años, junto con las pruebas de selección se implementaron los exámenes de Derecho de materias que no se imparten en el curso de formación. Una vez que el postulante ingresa, tiene que dar una serie de evaluaciones para acreditar que posee los conocimientos suficientes.
El perfil del nuevo juez
Según cifras de la Academia entregadas a "El Mercurio", desde 1996 a la fecha, las universidades tradicionales son las predominantes y, en particular, la U. de Chile. En los últimos tres años (cursos desde septiembre de 2014 a 2017), de 116 egresados, 30 pertenecían a esta casa de estudios, lo que representa un 25,8% del total.
Los postulantes son mayoritariamente de Santiago (56). Por género es prácticamente 50 y 50, y el rango de edad predominante, entre los 25 y los 29 años, equivalente a un 37,9% de los egresados del período.
Decanos de Derecho respaldan la crítica sobre calidad de los abogados.
En entrevista con "El Mercurio", el director de la Academia Judicial, Eduardo Aldunate, planteó el domingo, entre otros tópicos, que la calidad de los abogados "no es la deseable" y que están teniendo deficiencias en áreas básicas para el desempeño de la profesión, como la resolución de casos.
También hizo hincapié en la percepción de que algo está ocurriendo con la enseñanza del Derecho a nivel universitario en Chile, que hace que los egresados de los planteles educacionales no estén a la altura de los estándares esperados, al menos los que exige la Academia Judicial.
En ese contexto, el decano de la facultad de Derecho de la Universidad de Chile, Davor Harasic, concuerda con Aldunate, y precisa que "hay más de 50 facultades de Derecho, muchas de las cuales creen que es una carrera de "tiza y pizarrón", y se olvidan de que, como cualquier carrera, se necesita de investigación. La gran mayoría, la inmensa mayoría de las universidades, no tiene investigación y ni hablar de extensión. Además, académicamente son tremendamente pobres".
En tanto, la directora de la Escuela de Derecho de la Universidad Diego Portales, Alejandra Mera, señaló: "Hay una oferta enorme de programas de Derecho que no necesariamente tienen los estándares de calidad más altos. Yo creo que eso explica que puede haber una gran cantidad de abogados que no están egresando con las competencias necesarias". Además, "el mundo legal está completamente cambiado y las mallas de Derecho no se han adecuado a lo que significa ser un abogado en la actualidad".
El decano de la facultad de Derecho de la Universidad de los Andes, Alejandro Romero, cree que "la mala calidad es porque pueden haber malas prácticas instaladas dentro de las facultades. Se debieran hacer públicas en todas las facultades de Derecho del país la calidad de los docentes, quién imparte, su calificación profesional, quizás así podríamos llegar a entender las causas de lo que el director de la Academia Judicial está denunciando".
"Es efectivo que se ha ido "dulcificando" lo que es la enseñanza del Derecho, y eso es a lo que creo que apunta Eduardo Aldunate. Hay planteles que tienen notas de eximición para sus asignaturas y algunas bastante bajas. Preocupémonos de la calidad, de las horas efectivas impartidas", enfatiza Romero. “Y también sostiene que el ideal sería que las universidades pudiesen tener un trabajo más colaborativo con las instituciones ligadas al ámbito legal para, de esa forma, poder internalizar lo que es el trabajo real que se espera de un abogado actualmente".
Academia Judicial.
Desde 1996, cuando comenzó a funcionar esta "escuela", han egresado más de 1.500 jueces. La mayoría sigue proviniendo de universidades tradicionales.
El director de la Academia Judicial, Eduardo Aldunate, lleva prácticamente ocho años a la cabeza de esta especie de "escuela judicial", que imparte cursos de formación, habilitación y perfeccionamiento desde 1996. Su creación buscó transparentar y permitir una mejor selección de quienes integrarían la magistratura en el país y desde entonces han egresado más de 1.500 jueces.
Para que un abogado pueda convertirse en juez debe postular a la Academia y rendir un examen con 140 preguntas de selección múltiple. Los 120 mejores puntajes pasan a la siguiente etapa de resolución de casos. De ellos, 90 llegan a un tercer filtro: un test psicométrico, una entrevista individual y una actividad grupal, donde el objetivo es evaluar su respuesta ante un conflicto "relativamente polémico", explica Aldunate. Finalmente, 40 son entrevistados por una comisión que debe elegir un máximo de 24 candidatos.
Hace varios años se aprobó que no se llenaran todos los cupos si no había candidatos idóneos. "Estas son personas que van a entrar al Poder Judicial y una vez que entran no salen más, entonces la lógica nuestra era que quienes ingresaran a formación fueran candidatos relativamente buenos o más allá de cierto nivel", advierte el director.
Antigua sede academia Judicial |
Cantidad vs. calidad
Los postulantes en cada proceso van de los 300 a los 500 abogados y, en los últimos años, dice Aldunate, esas cifras reflejan que el interés en la magistratura no ha disminuido. Pero, apunta, "también puede responder, en parte, a que los abogados que egresan cada año son miles y siguen aumentando".
Según estadísticas del Poder Judicial, si en 2001 la Corte Suprema entregó el título de abogado a 1.222 personas, el año recién pasado, 2017, lo hizo a más de 3.800 egresados de Derecho.
-Muchas universidades imparten hoy la carrera de Derecho. ¿El explosivo aumento en el número de abogados impactó en la calidad de los mismos?
"Tendría que ir a la estadística de resultados de los exámenes. Como en la prueba de alternativa se cortan los mejores 120, no me he preguntado cuán mal están los que quedan por debajo, pero sí lo que yo diría es que en la resolución de casos, en que a nosotros nos llegan las notas de todos (los que llegan a esa etapa), diría que la calidad no es la deseable. No podría decir en qué medida ha ido bajando, pero algo pasa con la enseñanza del Derecho a nivel universitario en general. La percepción es que lo que están arrojando como resultados las escuelas de Derecho es deficiente y en cuestiones bien básicas. En general, no escuelas en particular".
Por lo mismo, hace algunos años, junto con las pruebas de selección se implementaron los exámenes de Derecho de materias que no se imparten en el curso de formación. Una vez que el postulante ingresa, tiene que dar una serie de evaluaciones para acreditar que posee los conocimientos suficientes.
El perfil del nuevo juez
Juez Ivette Renee Mourguet Besoain |
Según cifras de la Academia entregadas a "El Mercurio", desde 1996 a la fecha, las universidades tradicionales son las predominantes y, en particular, la U. de Chile. En los últimos tres años (cursos desde septiembre de 2014 a 2017), de 116 egresados, 30 pertenecían a esta casa de estudios, lo que representa un 25,8% del total.
Los postulantes son mayoritariamente de Santiago (56). Por género es prácticamente 50 y 50, y el rango de edad predominante, entre los 25 y los 29 años, equivalente a un 37,9% de los egresados del período.
Decanos de Derecho respaldan la crítica sobre calidad de los abogados.
En entrevista con "El Mercurio", el director de la Academia Judicial, Eduardo Aldunate, planteó el domingo, entre otros tópicos, que la calidad de los abogados "no es la deseable" y que están teniendo deficiencias en áreas básicas para el desempeño de la profesión, como la resolución de casos.
También hizo hincapié en la percepción de que algo está ocurriendo con la enseñanza del Derecho a nivel universitario en Chile, que hace que los egresados de los planteles educacionales no estén a la altura de los estándares esperados, al menos los que exige la Academia Judicial.
En ese contexto, el decano de la facultad de Derecho de la Universidad de Chile, Davor Harasic, concuerda con Aldunate, y precisa que "hay más de 50 facultades de Derecho, muchas de las cuales creen que es una carrera de "tiza y pizarrón", y se olvidan de que, como cualquier carrera, se necesita de investigación. La gran mayoría, la inmensa mayoría de las universidades, no tiene investigación y ni hablar de extensión. Además, académicamente son tremendamente pobres".
En tanto, la directora de la Escuela de Derecho de la Universidad Diego Portales, Alejandra Mera, señaló: "Hay una oferta enorme de programas de Derecho que no necesariamente tienen los estándares de calidad más altos. Yo creo que eso explica que puede haber una gran cantidad de abogados que no están egresando con las competencias necesarias". Además, "el mundo legal está completamente cambiado y las mallas de Derecho no se han adecuado a lo que significa ser un abogado en la actualidad".
El decano de la facultad de Derecho de la Universidad de los Andes, Alejandro Romero, cree que "la mala calidad es porque pueden haber malas prácticas instaladas dentro de las facultades. Se debieran hacer públicas en todas las facultades de Derecho del país la calidad de los docentes, quién imparte, su calificación profesional, quizás así podríamos llegar a entender las causas de lo que el director de la Academia Judicial está denunciando".
"Es efectivo que se ha ido "dulcificando" lo que es la enseñanza del Derecho, y eso es a lo que creo que apunta Eduardo Aldunate. Hay planteles que tienen notas de eximición para sus asignaturas y algunas bastante bajas. Preocupémonos de la calidad, de las horas efectivas impartidas", enfatiza Romero. “Y también sostiene que el ideal sería que las universidades pudiesen tener un trabajo más colaborativo con las instituciones ligadas al ámbito legal para, de esa forma, poder internalizar lo que es el trabajo real que se espera de un abogado actualmente".